Un senador republicano ha acusado a China de prepararse para la Tercera Guerra Mundial. Como la mayoría de las declaraciones de Washington con respecto a China, el legislador ha ignorado completamente el papel de Estados Unidos en la creación de tal escenario en primer lugar.
La semana pasada, el senador republicano James Inhofe de Oklahoma hizo la acusación de que el ejército de China se estaba preparando para la Tercera Guerra Mundial.
Es como si se estuviera preparando para la Tercera Guerra Mundial " , dijo durante una audiencia en el Senado centrada en los llamados desafíos presentados por Rusia y China.
" Estás hablando con nuestros aliados allí y te preguntas de qué lado van a estar.
Según Inhofe, EE. UU. Se ha sentado y observado mientras China construye su presencia militar en el Mar de China Meridional, convirtiendo las islas artificiales en potenciales plataformas de lanzamiento para su ejército.
La idea de que los EE. UU. Se ha sentado y mirado algo, alguna vez, en la historia del mundo, es algo ridículo. Incluso bajo el gobierno de Obama, el presidente tenía una estrategia de contención explícita que se suponía que debía abarcar y rodear a China desde todos los ángulos. El llamado Acuerdo de Asociación Transpacífico (TPP) también se diseñó para este propósito (aunque, por alguna razón, Donald Trump, quien es abiertamente anti chino, pensó que el acuerdo era una mala idea).
Inhofe también dijo que estaba “ preocupado ” de que “ nuestro mensaje ” se “ no conseguir a través .”
China recibe el "mensaje" alto y claro
No quiero ser una base, pero quizás el problema en la relación entre China y Estados Unidos es que el mensaje se está transmitiendo, alto y claro. Estados Unidos ha impulsado la expansión de la OTAN hacia y alrededor de las fronteras de Rusia. Ha invadido y bombardeado Irak, Siria (ocupando milagrosamente un tercio del territorio sirio, incluida su región más rica en petróleo), Libia, Yemen, Afganistán, Pakistán, Somalia e incluso Filipinas .
Además, esta superpotencia también ha amenazado con la guerra con Irán, Corea del Norte y Venezuela, todos los cuales comparten una relación cómoda con China. Washington suministra armas letales y respalda a los elementos neonazis conocidos en Ucrania; y una llamada telefónica filtrada incluso vio a la entonces secretaria de estado Victoria Nuland discutir sobre quién propuso poner dentro del gobierno de Ucrania después de que Viktor Yanukovych fuera expulsado del poder.
Bajo Trump, EE. UU. Ha iniciado una guerra comercial potencialmente desastrosa con China y ha coqueteado abiertamente con la idea de abandonar su apoyo a la política de Una China (por no hablar de sopesar el apoyo sustantivo a Taiwán).
Vamos, el mensaje se está transmitiendo. Si usted es una nación menor sin un suministro nuclear o el respaldo de una gran potencia nuclear, encontrará el ejército de los EE. UU. Justo en su puerta. Si tiene más de un puñado y necesita un enfoque menos directo, encontrará al ejército de los EE. UU. Justo al lado, mirando por la ventana, mientras que las sanciones estadounidenses causan estragos en su economía.
En ese contexto, si China se estaba preparando para la Tercera Guerra Mundial, no deberíamos estar tan sorprendidos. Tiene que haber una razón por la que, a principios de año, el primer pedido del presidente chino Xi Jinping a las fuerzas armadas de su país fue prepararse para la batalla (también conocida como " una lucha militar integral desde un nuevo punto de partida "), e incluso que " todo "Las unidades militares deben comprender correctamente las principales tendencias de desarrollo y seguridad nacional, y fortalecer su sensación de dificultades inesperadas, crisis y batalla ".
Además, uniéndose a Inhofe en la audiencia del Senado fue el director de estudios en el Centro de Pensamientos para una Nueva Seguridad Americana (CNAS), Ely Ratner. Hace aproximadamente un año, nuestra buena amiga Victoria Nuland (mencionada anteriormente en relación con el cambio de régimen y el apoyo a los archivos de neonazismo) fue nombrada como la nueva CEO de CNAS. También cuenta con el apoyo del propio rey drone, el general David Petraeus, y sus expertos han contribuido con sus opiniones a la política exterior, el New York Times, el Washington Post, Fox News, CNN, el Wall Street Journal (WSJ), y NPR. Advierte abiertamente contra la retirada de las tropas estadounidenses de Siria, por ejemplo, porque tal movimiento envalentonaría a Irán.
Creo que es justo decir entonces que cuando se trata de una discusión sobre China, CNAS debe ser una fuente de primer nivel. La compañía que mantiene Inhofe es evidentemente, por lo tanto, confiable.
China como el chivo expiatorio de los fracasos estadounidenses
Para ser justos, Estados Unidos ha estado haciendo sonar la alarma en China desde hace algún tiempo.
En noviembre del año pasado, el secretario de Estado Mike Pompeo dio a China una advertencia directa y clara de que debe comportarse como una " nación normal " (en el comercio) y " con respecto a las normas del derecho internacional ".
Si los cargos contra China son que no actúa como una nación normal y actúa en contravención del derecho internacional, parece que Estados Unidos y China tendrían mucho en común. Esto sería cierto incluso bajo las administraciones de Bush, Clinton y Obama, pero los Estados Unidos bajo Trump están ignorando abiertamente el derecho internacional y erosionando la confianza en cualquiera de las instituciones existentes de la ONU que quedan , haciendo que la más mínima mención del derecho internacional sea hipócrita y sin sentido.
Hace unos días, las agencias de inteligencia de los Estados Unidos advirtieron que China estaba utilizando espías de estudiantes para robar secretos de los Estados Unidos. A fines del año pasado, un grupo bipartidista de 12 senadores escribió una carta a los miembros principales de la administración Trump, instándolos a contrarrestar la interferencia secreta de China en las " democracias " de todo el mundo.
En octubre del año pasado, el teniente general retirado Ben Hodges advirtió que era muy probable que se produjera una guerra total entre Estados Unidos y China en los próximos 15 años. Si bien se debe prestar atención a la advertencia, la culpa nuevamente, según los expertos de la corriente general, parece estar totalmente a los pies de China, y el general retirado declara que Estados Unidos " no tiene la capacidad de hacer todo lo que tiene que hacer en Europa". y en el Pacífico para hacer frente a la 'amenaza china ' ”.
Incluso si el temor de Washington y sus aliados a China fuera justificado, vale la pena recordar que, oficialmente, Pekín tiene una base militar en el extranjero que se encuentra en Djibouti, en el cuerno de África. Los medios corporativos ahora se están dando cuenta del hecho de que, cuando se trata de África, los Estados Unidos tienen sus tropas dispersas por todo el continente. En total, los EE. UU. Tienen aproximadamente 800 bases ubicadas en todo el planeta, y no muestra signos de reducir su capacidad militar o su suministro nuclear .
Tendrías que tener un inmenso complejo de inseguridad para presidir más de 800 bases militares, pero temer a una nación que solo cuenta con una.
Además, el mes pasado, Donald Trump reveló una estrategia revisada de defensa de misiles en Estados Unidos que estaba más o menos obsesionada con China. Básicamente, el hombre se está preparando para una guerra espacial con China y Rusia, desarrollando sensores basados en el espacio para detectar misiles enemigos entrantes, así como explorando armas basadas en el espacio para derribar misiles disparados contra la patria estadounidense (nuevamente, desde Rusia y / o China).
Quizás China realmente se esté preparando para la Tercera Guerra Mundial en el Mar del Sur de China, pero al final del día, el cuerpo de agua es solo eso: el Mar del Sur de China. Si EE. UU. Se niega a aceptar la reclamación de Beijing de su proyecto de construcción de una isla en el mar y teme el potencial de China para proyectar su destreza militar en el océano, entonces también debe rechazar su propia reclamación sobre las vías fluviales de la mayor parte del planeta y enviar Sus bases militares regresan a donde vinieron.
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